Desde FedeSeguridad creemos que la colaboración efectiva entre el sector privado y el público en materia de seguridad es clave para contrarrestar los delitos en Colombia.

Lo anterior, teniendo en cuenta que los sectores desempeñan roles complementarios en la protección de la sociedad, y se hace indispensable la necesidad de regular, actualizar y adaptar las nuevas demandas en seguridad que la sociedad colombiana reclama.

Para ello, la Federación Colombiana de Empresas de Vigilancia y Seguridad Privada ha presentado algunas propuestas para fortalecer dicha colaboración.

Entre las principales propuestas se encuentran: establecer un Plan Integral de Colaboración, fortalecer los protocolos de comunicación, facilitar la capacitación conjunta (para entrenamientos, marco legal, atención de crisis, etc.), fomentar el intercambio de información, uso de tecnología compartida, coordinación en eventos públicos, así como la implementación de sistemas y servicios de monitoreo y tecnología.

De hecho, la experiencia internacional demuestra día a día que fomentar la colaboración entre la seguridad privada y la Policía Nacional es una práctica común con grandes resultados. Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Francia, Brasil, Sudáfrica, España y México son ejemplo de buenas prácticas, pues trabajan en conjunto con las agencias de seguridad pública en diversas áreas, como la protección de instalaciones, la seguridad en eventos y la vigilancia de propiedades.

De hecho, no se puede desconocer que la ciudadanía hoy reclama mayor seguridad y este tipo de colaboración es la respuesta. Más aún, cuando en lo corrido de 2023 las cifras de delitos e inseguridad en Colombia se encuentran en crecimiento exponencial. De acuerdo con el Ministerio de Defensa, entre otros delitos, aumentó el  secuestro 91%, el hurto a vehículos 4%, el hurto a residencias 6% y el hurto a personas 18%. A lo cual se le suma que la capacidad humana y operacional de la fuerza pública no logra cubrir la alta demanda de la criminalidad. Datos de la SuperVigilancia indican que mientras la seguridad privada cuenta con un registro de 390.730 personas al servicio, la Policía Nacional cuenta con un personal que asciende a los 165.794 uniformados. Esto es una relación aproximada de 2.4 operativos de seguridad privada por cada uniformado de la Policía a nivel país. Ahora si lo observamos en relación con la capital principal, por cada policía hay casi 11 operativos del sector de seguridad y vigilancia privada. Esta relación pone de manifiesto, una vez más, la importancia y presencia significativa del sector privado en la seguridad de la ciudad.

En síntesis, se trata de una alianza significativa para el desarrollo económico, la innovación, la generación de empleo y la calidad de vida de la población, mediante la adopción de medidas y prácticas responsables entre la seguridad privada y la seguridad pública para complementar el quehacer y continuar la lucha contra el delito y mejorar la percepción de seguridad en el país.

Para conocer en detalle las principales propuestas aquí enunciadas puede consultar el documento completo a través del siguiente link: https://www.fedeseguridad.org/web/publicaciones/